INGREDIENTES: 500 gr. de queso mascarpone, cuatro huevos, bizcochos, azúcar, brandy y café.
PREPARACIÓN: Mezcla en una tarrina 500 gramos de queso mascarpone con azúcar y brandy a discreción, para luego añadir a la mezcla las YEMAS de cuatro huevos. Con todo eso se hace una crema. En otro sitio, las CLARAS se montan a punto de nieve y después se añaden a la fiesta.
Haces un par de cafeteras y pones el café en un plato (mejor sopero, xD), para ir empapando los bizcochos y hacer un piso en el recipiente donde irá el tiramisú. Luego la fantástica crema -con las claras a punto de nieve añadidas- que has hecho antes. Luego piso de bizcochos empapados en café. Luego la fantástica crema otra vez. Así hasta que se te acabe el material. Al final puedes rallar por encima un poco de chocolate -para la galería- pero la genialidad ya está hecha.
Fácil, ¿no? Pues el resultado es espectacular. Garantizado. Es impresionante la (des-)proporción entre lo fácil que es de hacer y lo bien que sale. Gracias Ale.
PD: Por favor, si tienes una receta filosóficamente resultona -por lo de "Primum vivere, deinde philosophari", que mal traducido quiere decir que está muy rico y te deja tiempo para reflexionar- puedes mandarla y la ponemos aquí, que con eso de comer todos los días saber alguna más no vendrá mal. La que hoy os propongo no es ilegal ni amoral, pero... casi.
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