Hay que decir que la epistemología va referida al modo de conocer, el conocimiento que va ligado al conocimiento científico y la opinión, considerada por Platón como una forma de saber errónea, que no es totalmente verdadera. Los sentidos son aquellos que nos llevan a la opinión, ya que por ellos todo cambia y nunca permanece, por lo que no podemos estar seguros de lo que nos están mostrando, para evitar este aspecto negativo, Platón se basa más en la episteme o conocimiento científico, el cual es capaz de mostrarnos la esencia de todas las cosas por medio de la inteligencia y el pensamiento.
Cuando los sentidos no transmiten ciertas contradicciones, es cuando el alma llama a la inteligencia para mostrarnos la esencia de cierto objeto, si bien se puede poner el ejemplo que Platón nos muestra entre tres dedos, los tres son lo mismo pero cada uno de un tamaño, por lo que gracias a la inteligencia podremos reconocer cual de todos se acerca más a la Idea de grandeza, cual a la de pequeñez...
Platón nos explica mediante mitos las relaciones entre la epistemología y la ontología, juntas nos muestran la realidad que vivimos y conocemos.
En el mito del símil de la línea, en el cual se unen los dos dualismos, el epistemológico y el ontológico:
Por un lado tenemos los grados de la realidad, aquí es donde tiene lugar el dualismo ontológico. En primer lugar se clasifica el mundo inteligible donde encontramos a las Ideas y después a los objetos matemáticos los cuales son inferiores ontológicamente a las Ideas, pues hay que ver que ellos parten de ciertas Ideas, por lo cual esto convierte a éstas en algo más real. Esto iría relacionado con la inteligencia y el pensamiento, los cuales forman el conocimiento científico "episteme" en el dualismo epistemológico. Las Ideas estudiadas por la inteligencia y los objetos matemáticos estudiados por el pensamiento.
En segundo lugar estaría el mundo sensible, en el cual se encuentran los objetos físicos y las imágenes, relacionados con la creencia y la imaginación que forman la opinión "Doxa" el segundo grado en el dualismo epistemológico.
También encontramos el mito de la caverna, en el cual, a partir de la historia de una caverna en la que habitan prisioneros que siempre han estado tomando como real unas sombras, llegan a atacar al prisionero que fue capaz de salir al mundo de fuera y ver que hay algo más real que lo que siempre han visto.
El prisionero que se desata seria si duda el filósofo, el cual tiene razón pero nade quiere escucharle, por ello los demás son capaces de atacarle y matarle por no cambiar la realidad que ellos toman como aceptable. Los pasos que sigue este prisionero son los siguientes:
al desatarse se encuentra guiado por su maestro quien le ayudara a encontrar el camino, pero siempre que el prisionero sea capaz de encontrarlo por su cuenta. Una vez encuentra la puerta de la caverna sale al exterior, donde ve un nuevo mundo en el que todo es más real. Tras duras etapas, el prisionero es capaz de contemplar el sol, que estaría considerado como la Idea de bien, la Idea de todas las Ideas. Cosa que antes solo podía observar mediante el reflejo del agua, pues sus ojos ven tanta luz que sería incapaz de conocer todo de repente. Una vez a conseguido alcanzar la Idea de bien está destinado a volver a la caverna donde verá todo mucho mejor que los demás y así enseñarles a ellos el camino hacia la verdadera realidad que llevará hacia la Justicia y la armonía.
Este mito es un claro ejemplo que usa Platón para explicarnos las etapas por las que debe pasar un filósofo para conseguir gobernar el Estado, siempre relacionándolo con la injusticia que vivió con su maestro Sócrates.
A todo esto, comprendemos que Platón era partidario de considerar como más verdadero a las cosas que no vemos ni tenemos materialmente pero si que nos aportan ciertos conocimientos que no alcanzamos con los sentidos y los objetos materiales. Por ello se basa en las Ideas, conceptos que adopta como realidades y hace basar su filosofía en ellas.
Laura Herrera
Dos cosas que decir al texto.
1. Estoy contento de ver la capacidad de reacción de quien puede hacerlo mucho mejor de lo que lo hizo hasta ahora. Ésa es la manera. Éste es el momento y si el cachondeo de las fiestas no ayuda pues habrá que buscarle un hueco. Recuerdo que el día 11 tenemos una cita con Platón en la que me gustaría veros a todos.
2. Un texto sólido y articulado. Muy bien.
Espero que alguno más venga a pegarme de la misma forma con la nota en las narices, que tengo ganas de cambiarlas (las notas, claro).
Y esto ya empieza a ser otra cosa.
¡Prepárate Descartes, que dentro de poco sabremos dónde vives!